Los desmienten. Cientos de comuneros del centro poblado de
Punayllo, anexo a Ancocala, en el distrito de Ananea, en la provincia de San
Antonio de Putina, salieron a desmentir las acusaciones de las cooperativas y
los mineros informales que trabajan en la zona, quienes los acusan de ser “el
foco” contaminante de la cuenca del río Ramis.
Los comuneros refirieron que los responsables directos de la
contaminación en la zona son las cooperativas mineras. “Los grandes mineros
informales que existen en Ananea, continuamente nos satanizan, acusándonos de
contaminar el río Ramis, cuando no es verdad”, sostuvieron. Esto, cabe
precisar, fue comprobado por Los Andes en su última visita al lugar.
Según constatamos allí, existe la unión de dos ríos: el que
baja de Ananea, completamente turbio producto de lavado de oro que hacen los
cientos de mineros artesanales, y el otro, el Tisicho, que está completamente
seco y árido. Con esto se descarta cualquier tipo de contaminación de la cuenca
del río Ramis por los pobladores de Punayllo.
Para Rosas Paye Mamani, presidente de la comunidad referida,
los denominados mineros grandes son los que contaminan en un 90% toda la
cabecera de la cuenca Ramis. “Ellos siempre nos echan la culpa ante las
autoridades y la opinión pública; pero, vean, nosotros ni agua tenemos; al
contrario, tenemos que llevar el líquido en cisternas para poder trabajar”,
señaló.
De otro parte, los pobladores también denunciaron que los
mineros de Ananea vienen concesionando todos los terrenos a diestra y
siniestra, sin ningún tipo de consulta a la comunidad. Llegaron a extremos,
según manifestaron: incluso habrían concesionado el terreno de un centro
educativo, en la comunidad de Ancocala, así como una capilla que hay en el
mismo sector.
Ellos aclararon no tener ningún tipo de armas para hacer
frente a una intervención militar. “Eso le inventaron los de Ananea para que el
Estado actúe en su zona, pero no donde realmente hay contaminación”,
sostuvieron. “Nosotros somos pacíficos; es más, buscamos la formalización a
través del diálogo”, añadieron.
Los comuneros indicaron que pueden prestarse para ser un
proyecto piloto que inicie con la formalización de sus actividades, de modo que
después se continúe con otras zonas, paulatinamente. “La idea, creemos, es
erradicar la minería informal”, culminaron.
Fuente : Los Andes
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